3 de noviembre de 2016

Resiliencia, tu oportunidad después de la dificultad

¡Buenas noches equipo!
Como ya saben los seguidores de Tú Psique Puedes en redes sociales, el domingo estrenamos una nueva sección donde se definirán conceptos relacionados con la Psicología, los Recursos Humanos y curiosidades varias. Si bien la primera palabra que definimos fue "Serendipia",  pensé que mi palabra favorita "RESILIENCIA" no merecía un breve espacio en las redes, sino una publicación de los jueves en el Blog. Pues bien, aquí estoy...dispuesta a daros el empujón que muchos necesitáis para continuar o, simplemente, haceros un poco de compañía en este día que amaneció nublado, pero ha visto el sol.

Según autores como Chávez e Yturralde, resiliencia es la capacidad que poseemos frente a las adversidades, para mantenernos en pie de lucha, con dosis de perseverancia, tenacidad, actitud positiva y acciones que permiten que avancemos en contra de la corriente, y superarlas.
Puede que esta sea la definición que más me guste sobre este término. No sabría decir exactamente el motivo. Quizás sea por la humanidad que encierra, quizás por la manera de decirnos que si queremos vamos a poder con todo lo que nos propongamos o, muy probablemente, porque se acerca de una forma mágicamente perfecta a todo aquello que quiero transmitiros desde este espacio a quienes buscáis vuestra oportunidad de forma activa e incansable, a quienes ponéis a diario toda esperanza en un negocio que es vuestra ilusión, a quienes no tenéis miedo de reciclaros y reiniciar aquella parte de vuestra persona que andaba dormida, pero pedía a gritos despertar...incluso a quienes no se sienten identificados con nada de lo anterior, pero cada día baja los pies de la cama con la esperanza de que todo se arreglará y cobrará sentido...
Resiliencia es aquella palabra que representa la habilidad del ser humano para enfrentar situaciones adversas e incluso destructivas de la vida. Representa la superación de situaciones de presión en las que creemos que tenemos un escaso control, pero de las que salimos victoriosos, transformados.

Amigos, amigas...¿sabéis a cuántos resilientes me he ido encontrando a lo largo de la vida?
Si hacemos memoria, seguro que a todos se nos vienen a la cabeza muchos de ellos. Personas que han superado enfermedades, muertes trágicas de seres queridos o que han nacido en lugares del mundo donde las oportunidades de supervivencia brillaban por su ausencia y, finalmente, quienes han brillado han sido ellos...precisamente por saber sobreponerse.
También están aquellas personas que han nacido con algún tipo de etiqueta absurda colgada al cuello, como quien lleva un complemento más haciendo juego con el cinturón o las zapatillas. Hablo del tipo de personas a las que solemos categorizar como discapacitados o deficientes; de aquellas personas por las que nadie apostaba demasiado en cuanto a su capacidad intelectual pero que ¡OJO! hoy día vienen demostrando a destajo que si reciben las mismas oportunidades que el resto (educativas, de inserción, orientación, sociales...) son tan (o más) capaces como cualquiera de estudiar una carrera, impartir clases, emprender negocios de éxito, protagonizar obras de teatro y un sinfín de cosas más.
No puedo olvidarme tampoco de aquellas miles de personas que han visto rodar cuesta abajo todo aquello que habían construido antes de que la crisis económica llegara. Jóvenes que han tenido que lanzarse a nuevas culturas buscando una solución a su situación. Padres y madres que han llorado mucho al acostarse porque sus hijos no iban a tener un vaso de leche al levantarse....

Tú  y yo hemos visto hacer uso de la resiliencia a muchas de estas personas. Las hemos visto invertir tiempo y esfuerzo para superar el sufrimiento en cualquiera de sus versiones. Las hemos visto reencontrarse consigo mismas. Las hemos observado tolerando tales cantidades de frustración y presión que, por un momento, llegamos a pensar que "no saldría de esa", pero salió más fortalecido que antes, sabiendo afrontar duras complicaciones de la forma más constructiva y asombrosa que nunca viste.

Haz memoria de nuevo, querido lector...sé que tú también tienes experiencias de resiliencia o estás a punto de experimentarlas. De lo contrario, no habrías llegado leyendo aquí...no te rindas, TÚ PSIQUE PUEDES.

9 comentarios:

  1. Interesante punto a discernir RESILIENCIA. En Venezuela de la resistencia a la resiliencia.

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  2. Gracias por tu aportación José, el contexto Venezolano actual es un gran ejemplo de que sois resistentes y resilientes ¡Saludos cordiales desde España!

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  3. Gracias estimada Matha, muy interesante tu aporte, RESILENCIA a la adversidad, me siento identificado
    ante estas situaciones muy complicadas de trabajo y situaciones atipicas, de la que me han servido para sobreponerme y tener una mejor percepcion de las cosas.
    Saludos

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    1. Estimado Pedro, gracias por comentar.
      Me alegra el hecho de que te sientas identificado con la lectura y, sobre todo, de que hayas mostrado tu capacidad de resiliencia. Te deseo mucha suerte.
      ¡Saludos!

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    1. ¡Hola Ester!
      Gracias por compartir tu opinión sobre esta página con todos. Me alegra que te guste.
      Te invito a permanecer por aquí, así no te perderás la publicación de esta noche.
      ¡Un Saludo!

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  5. Muy interesante su articulo, creo que en alguna ocasion todos pasamos diversas situaciones que nos generan esa insertidumbre, que nos muestran un entorno sombrio que pareciera no tener fin, pero la misma fuerza de supervivencia nos hace sacar fuerzas y salir adelante.

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    1. ¡Buenas tardes Albenro!
      Gracias por dar a conocer tu opinión sobre el tema tratado, es muy gratificante saber que a los lectores de este espacio os gusta lo que escribo, que para eso lo hago.
      Te animo a continuar hacia adelante, con fortaleza y valentía. ¡Saludos cordiales!

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